Adicción a las respuestas
El
poder hacernos preguntas y tener la necesidad de buscar respuestas es un hecho
que nos diferencia de las demás especies animales. Esta diferencia es la que
nos hace ser seres racionales y este diálogo interno que nos caracteriza que
nos priva o nos lleva a utilizar la intuición es el adicto a buscar respuestas
en todas partes y lugares.
SI
nos detenemos un momento a pensar en cualquier decisión que vayamos a tomar en
cualquier momento y que vaya a determinar un cambio, siempre vamos a tener un
diálogo interior antes de decidirnos a lo que vamos hacer y de que forma.
Este
diálogo interior es cosa de dos, de nuestra
conciencia y de nuestra intuición, y por norma general gana nuestra
conciencia, la parte “responsable”, la que lo sabe todo, esa que te plantea
cien mil preguntas antes de tomar una decisión y encima lo sabe todo sobre tu
futuro, sabe todo lo que va a pasar siempre, sin ninguna duda, ¿os suena?
¿Pero
si hago esto que pasará? Seguro que
saldrá mal, mejor no lo hago
Si le digo esto se lo tomará así, mejor no se lo digas.
¿Si
tomo esta decisión que implicará? Para
que, si total, ahora estas bien así.
Constantemente
nos pasamos la vida buscando respuestas y contestándonos a nosotros mismos
cosas que no sabemos y que nadie sabe, no es que sea malo ya que estas
respuestas son un método de defensa y supervivencia, pero tampoco diremos que
es bueno, y ahora explico el porqué.
El
hecho de buscar respuestas de algo que no la tiene es que te impide avanzar, te
impide incluso ir a buscar esas respuestas, por ejemplo,
¿Si te planteas emprender en un
negocio sabes como te irá?
¿Si empiezas a estudiar algo para un
futuro trabajo sabes si lo encontraras?
¿Si cambias de trabajo sabes si será
para bien o para mal?
¿Si terminas o emprendes una nueva
relación?
¿Si pides un aumento te lo darán?
El
hecho de saber lo que tenemos nos genera un adorable confort y la conciencia lo
sabe, no le gusta el riesgo, el miedo, la incertidumbre y por eso nos protege
contestándonos y convenciéndonos para que no le causemos molestias y no hagamos
caso a nuestra parte aventurera e irracional que es la intuición.
No intentes responderte mas preguntas a las que no sabes las respuestas, prueba, experimenta, pide… y cuando de verdad hayas encontrado las respuestas a tus
preguntas iniciales sé consciente de que habrás hecho y construido un camino en
el que habrás aprendido mucho más de lo que ya sabías. Y ahora… ¡a por otras!
"En el cento de tu ser tienes las respuestas; sabes quién eres y sabes qué quieres", Lao Tse
Gracias a tod@s!
Os dejo un link a un sueño:
Facebook:
Twitter:
0 comentarios:
Publicar un comentario